¿Es obligatorio llevar gafas de repuesto en el coche?

Utilizar las gafas graduadas a la hora de conducir es fundamental para distinguir con claridad todas las señales de tráfico y ver nítidamente a los peatones y al resto de coches. Manejar el volante de forma segura y con confianza, únicamente es posible cuando se tiene buena visión. 

Por este motivo, son muchos los que creen que es obligatorio llevar gafas de repuesto en el coche si el carnet de conducir indica que el conductor las necesita. Sin embargo, la realidad es diferente.

No, no es obligatorio llevar gafas de repuesto

La normativa de tráfico actual no especifica la obligatoriedad de llevar gafas de repuesto en el coche. La ley anterior, que se modificó hace casi 20 años, sí que lo consideraba preceptivo. Esta es la razón por la que muchos conductores creen que necesitan llevar unas segundas gafas en sus vehículos.

El carnet específica, a través de códigos, si el conductor tiene alguna restricción concreta para circular. La clave 01 indica que es necesaria una corrección de la visión:

  • 01.01: gafas graduadas.
  • 01.02: lentes de contacto.
  • 01.05: recubrimiento de un ojo.
  • 01.06: gafas o lentes de contacto.
  • 01.074: ayuda óptica específica

Aquellas personas con uno de estos códigos deberán utilizar la corrección necesaria siempre que conduzcan para evitar multas que pueden alcanzar los 300€ y, más importante, garantizar nuestra seguridad en la carretera. 

Teniendo en cuenta todos estos factores, en General Optica recomendamos contar siempre con unas gafas que puedan sacarnos de un apuro en un momento de necesidad. Al igual que una rueda de repuesto nos permite llegar de forma segura hasta el taller más cercano sin tener que llamar a una grúa, con un par de gafas adicional en la guantera se puede continuar el viaje si se estropean las que llevamos puestas. Llevar gafas de repuesto en el coche no es obligatorio, pero sí conveniente.

Conduce siempre con las gafas adecuadas

Cada actividad tiene unas exigencias diferentes para los ojos y llevar un vehículo no es una excepción. Utilizar unas gafas inapropiadas o que no estén bien graduadas puede hacer que los ojos se fatiguen antes de tiempo o que suframos dolores de cabeza que afecten a la conducción. Para circular de forma segura, ten en cuenta estos aspectos:

  • Usa unas gafas con la corrección que necesitas. Si habitualmente llevas gafas para la miopía, la hipermetropía o el astigmatismo o si normalmente utilizas gafas progresivas, no cambies a un tipo diferente a la hora de conducir.
  • Elige una montura que se adapte a tu fisonomía adecuadamente para que no se caigan ni aprieten.
  • Cuanto mayor sea el campo de visión, mejor. Si es posible, escoge unas gafas con cristales grandes.
  • Los cristales con filtro de luz azul o antirreflejos, que se utilizan habitualmente para trabajar frente al ordenador, ayudan a minimizar los deslumbramientos producidos por las luces de otros coches.

La vista es el sentido que más en forma debemos tener a la hora de conducir. Por lo tanto, las gafas de repuesto que lleves en el coche deben tener la graduación que necesitas actualmente. Si las necesitas, pasar de ver nítidamente a percibir los objetos con alguna deficiencia porque las segundas gafas tienen las dioptrías que utilizabas hace un tiempo, puede perjudicar a la conducción.

 

 

Gafas de sol para el coche

Las gafas de sol son altamente aconsejables para conducir, ya que el exceso de luz o los destellos pueden afectar a la visión en determinados momentos del día. Desde General Optica recomendamos llevarlas siempre en el coche para utilizarlas cuando sea necesario. Para elegir las más adecuadas para circular, te en cuenta estos aspectos:

  • Aquellas personas que necesitan gafas graduadas, deben elegir gafas de sol con las dioptrías de corrección que necesiten a no ser que prefieran el uso de lentillas.
  • El color de los cristales es muy importante: 
    • los marrones son buenos para conducir porque aumentan el contraste y permiten percibir los colores adecuadamente. 
    • los grises permiten ver correctamente prácticamente en cualquier situación, por lo que resultan los más recomendables.
    • los cristales demasiado oscuros no son aptos para conducir, ya que impiden ver correctamente.
    • los cristales excesivamente claros no protegen en todas las situaciones y solamente son válidos en los días nublados. Además, algunos tonos, como el amarillo, pueden hacer que confundamos colores fundamentales como los de las luces de los semáforos.
  • Los cristales polarizados cuentan con filtros UV, reducen los brillos y evitan los deslumbramientos.
  • Solo los cristales con la marca CE cumplen con la normativa europea.

En definitiva, a pesar de que contar con unas gafas de repuesto no es obligatorio, nuestro consejo es que tengas siempre a mano unas gafas graduadas de repuesto y otras de sol.

Si quieres saber más acerca de qué gafas son las más adecuadas para conducir, pide cita con nuestros ópticos expertos.